El efecto Föhn (fagueño) en el Pirineo

El efecto Föhn (fagueño en Huesca) es un fenómeno meteorológico reconocido y probablemente experimentado por todos, es cuando una nueve empujada por el viento contra una montaña, supera la cima, y la nube simplemente desaparece…

Para poder hablar de fagueño es necesario que a barlovento (vertiente de la montaña en la que impacta el viento) haya precipitaciones o “mal tiempo”. Este fenómeno se produce porque durante el ascenso de la nube al ser empujada por el aire contra la montaña, ésta se enfría, se alcanza el nivel de condensación y aparecen las precipitaciones. Cuando la nube ha sobrepasado la cresta de la cordillera y ha soltado toda la precipitación el aire pasa a ser seco (la nube desaparece al evaporarse las condensación de agua en el aire) y con lo cual se calienta y se acelera debido al fuerte descenso a que está sometido.

El fagueño en nuestra región se da cuando hay precipitaciones en el lado norte de los pirineos y viento predominante del Norte o Tramuntana, perpendicular a la cordillera. Con esas condiciones en Francia se originan en la vertiente española de los Pirineos una subida notable de la temperatura, una bajada brusca de la humedad y también una aceleración del viento que desciende por la vertiente de sotavento (vertiente de la montaña opuesta a barlovento) y que se recalienta por compresión.

En el Pirineo, las advecciones (corrientes de aire) del norte y del sur son las que dan lugar a este fenómeno, pero más frecuentemente las del norte y en la estación invernal. Es en esta época cuando se producen más errores de predicción ya que las advecciones del norte suponen una bajada de temperaturas generalizada debido al aire frio, proveniente del Norte a baja temperatura, y en cambio, por el efecto fagüeño las temperaturas no bajan en la vertiente española si no que ascienden de forma intensa dando lugar a amplitudes térmicas muy notables, incluso en pleno invierno.

Éste fenómeno es muy característico y da lugar a cambios muy bruscos de climatología en un lado de la cordillera mientras que a pocos kilómetros de distancia puede estar pasando todo lo contrario.

Como vale más una imagen que mil palabras, en la foto tomada desde Olvena y que seguramente todos reconoceréis podéis ver el efecto fagüeño. Una densa barrera de nubes que corona los pirineos, las nubes están en constante movimiento pero nunca rebasan la cordillera…

Encontrareis las explicaciones mucho más técnicas y detalladas que han servido de fuente para esta entrada, AQUÍ y AQUÍ. Clicar sobre la imagen para ver mas grande